Santander Turístico.

Qué ver  qué hacer en Santander (Cantabria)

Encaramada en una larga península, Santander se asoma al mar entre cuestas y vaguadas. Su gran impulso se produjo en el siglo XVIII gracias a una creciente actividad comercial, y fue en el XIX cuando comenzó el incipiente turismo con los populares Baños de Ola. Hoy, la ciudad ofrece varias caras.

Desde el Santander monumental hasta el Santander marítimo, sin olvidar joyas naturales como la Península de La Magdalena y las playas del Sardinero.

Paseo de Pereda

Declarado Bien de Interés Cultural en 1.985, es la joya urbanística de la ciudad. Está engalanado con poderosos y significativos edificios administrativos como el Banco de Santander y monumentos dedicados a personajes ilustres de Cantabria, como la estatua de Pedro Velarde.

Embarcadero y Puertochico

Museo de Bellas Artes

Data de 1.907 y está considerado la primera pinacoteca regional. Acoge importantes obras que van desde el siglo XV a nuestros días. La más destacada es el Retrato de Fernando VII encargado a Goya en 1.814.

Península de la Magdalena

Su privilegiado emplazamiento la convierte en vigía del Cantábrico. En ella sobresale el elegante palacio de estilo inglés que la ciudad regaló a Alfonso XIII y Victoria Eugenia con motivo de su boda. Tambien destacan el paraninfo, las Caballerizas reales y el campo de Polo.

Playas del Sardinero

La moda de los Baños de Ola y los veraneos regios convirtieron el Sardinero En en la zona con mayor desarrollo turístico en los la primeros años del siglo XX. Se trata de una pequeña ciudad-balneario con dos bellas playas situadas en la zona este de Santander, entre La Magdalena y Cabo Menor.

Cabo y faro Mayor

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