Valle de Cayón, Cantabria. Arte Románico
El Románico en el Valle de Cayón
El Valle de Cayón, en la comarca del Pas – Pisueña, atesora una nada desdeñable cantidad de elementos románicos: en Argomilla, la iglesia de San Andrés con su colección de sarcófagos; la Iglesia de Santa María, en Santa María de Cayón o la ermita de San Miguel, en la soledad del monte de Carceña.
A tiro de piedra de este valle los amantes del románico no podrán perderse la cercana Colegiata de Castañeda.
Iglesia de Santa María, en Santa María de Cayón.
Del s. xII aunque muy modificada posteriormente, un elemento notable es la altura de su construcción. Destaca su gran espadaña, ya gótica y la portada, con inaco arquivoltas casi sin decoración. El ábside, románico, es una joya tanto por dentro como por fuera.
Iglesia de San Andrés, en Argomilla de Cayón.
También del siglo XII, esta iglesia declarada Bien de Interés Cultural conserva muchos elementos del románico, como el ábside, separado de la nave por un arco con bellos capiteles historiados.
En un anexo puede verse una veintena de sarcófagos de los siglos XI al XIII.
ALREDEDORES
Lloreda de Cayón
Como complemento a las iglesias románicas del valle de Cayón, el encantador pueblito de Lloreda exhibe en los rincones de su viejo barrio típicas casas montañesas en hilera y las casonas blasonadas que dan fé de su hidalguía. La Iglesia de San Juan Bautista, del siglo XVII, es el monumento más destacado de Lloreda, junto a la de Santa Lucía y la ermita de San Vicente, o por supuesto, el barrio antiguo de la Agüera.
Esles de Cayón
En el valle de Cayón y con la sierra de la Matanza de fondo, Esles conserva la iglesia parroquial de San Cipriano, además de casonas blasonadas y un buen número de ermitas. También merece la visita un bonito hayedo cercano.